18 enero 2011

¿Por qué las conductas sociales? (buf Blanca, esto va para largo y tienes mañana examen) ¿Por qué esa manía de manifestar de una determinada manera los sentimientos? ¿Por qué esa manía de sentir algo simplemente por la manera en que lo manifiestas?

Me acuerdo de alguien, de alguien drogado, muy drogado, bailando (moviéndose automáticamente) con la mirada perdida, me hacía pensar en sus neurotransmisores, en las moléculas de calcio en sus músculos, en las vías inhibitorias inhibidas. Pero no por un momento de frikismo ni mucho menos, él era eso, no era esa persona, no era ese alguien que se pudo llegar a ver en él alguna vez, estaba completa y enteramente (¿eternamente?) despersonalizado.

Y me dio asco, pero asco de verdad, del de las arcadas, del que te tienes que ir. Ni siquiera fue “metafísico”, ni siquiera daba para ponerse a pensar, ni siquiera daba para plantearse que qué piensa, que por qué lo hace, que si así se siente mejor, que si así se siente más en ese pedestal en el que queremos estar todos, posando mientras nos hacen una estatua, nos tiran flores y nos envidian.

¿Qué somos? ¿Para qué estamos? Me imagino a mí misma “mamá, ¿para que estamos en el mundo?”, supongo que alguna vez se lo preguntaría, o no, igual no, creo que me daba miedo exteriorizar mis miedos (creo que me lo sigue dando). Y es otra vez lo de antes: ¿Por qué esa manía de sentir lo que hacemos o de hacer lo que sentimos?

Y si te sacudes muy fuerte la cabeza y te da por sonreír piensas: porque de alguna manera nos tendremos que comportar, podemos ser cualquier cosa, podemos estar para cualquier cosa.

Es tan jodidamente sencillo que da rabia: La espiral formando la galaxia, una supernova explotando en alguna parte, la Tierra condenada a girar, la semilla condenada a ser árbol, la adrenalina llegando a su receptor a-adrenérgico… y nosotros siendo libres, así, porque sí, LIBRES… Cómo no negarlo, cómo no justificar los textos, ordenar las cosas por colores, cómo no volvernos locos…

Y es que además es un simple ahorro energético: “la rutina no supone esfuerzo”, y lo pongo entre comillas porque creo que resume el universo (toma ya, qué drástica). Ejemplos paradójicos del 18 de Enero: Hoy he tenido que hacer un esfuerzo por no hacer el transbordo de plaza Cataluña rápido, por no llegar al vagón en el que me monto normalmente, por no empezar a andar en las escaleras automáticas cuando lo ha hecho el de delante.

(y creo que ya está... sí, aunque no haya dicho nada sobre la primera pregunta ya está)

No hay comentarios:

Publicar un comentario